Nuevos aires conectan hoy la Colaboradora. Selene Gálvez, Marian Recaj y María Jordán son las nuevas conectoras de participación, formación y modelo de negocio, ¡Conócelas!
No nos equivocamos si decimos que todos los miembros de esta comunidad conocen a Selene, María y Marian, las nuevas conectoras, ya que son personas activas y dispuestas a colaborar dentro de este vivero de emprendimiento. Pero, esperad, porque traen ideas frescas y tienen marcados objetivos que cumplir ahora que son conectoras.
Selene Gálvez, luchadora y enamorada de los valores de la Colaboradora, viene de la gestión emocional, el trabajo social y el coaching. De ahí surge su proyecto Copiloto emocional, a través del cual acompaña a personas con enfermedades graves para que puedan vivir ese proceso de una forma más positiva.
Marian Recaj, idealista y siempre implicada en la formación de otras personas, estudió historia del arte y gracias a la Colaboradora encontró el que es hoy su proyecto: Fun Fam. En él une interpretación del patrimonio y enseñanza de idiomas, dos cosas que siempre le han apasionado.
María Jordán, dinámica e involucrada, llegó a la Colaboradora en la que fue su primera hornada (junto a otras cien personas). Es una emprendedora nata, estudió Administración y Dirección de empresas y hoy en día lleva a cabo un proyecto de gastromarketing.
Todas ellas están muy ilusionadas y agradecidas a la junta gestora de La Colaboradora por confiar en ellas para trabajar a la cabeza de estos grupos. Al estar tan implicadas desde siempre en las áreas de las que ahora son conectoras, han tenido mucha conexión con sus predecesores Paola Fatás, Miriam Moreno y Carlos Losada. Junto a ellos han dando sus primeros pasos conectando emprendedores y sacando adelante eventos como, por ejemplo, las Coasesorías en el caso de Selene y Miriam (la anterior conectora de participación).
Formación es un área que ha evolucionado mucho y desde la que, según nos cuenta Marian, están animando a que todo el mundo se implique y dé formaciones, porque todos tenemos algo que compartir. De hecho, nos adelanta que están preparando una futura “coformación para coformadores”. Sí, no es un trabalenguas, es una formación para, precisamente, animar a todos los miembros de la Colaboradora a que compartan sus conocimientos y habilidades.
Selene defiende que su equipo es el más importante para la Colaboradora, ya que sin participación no existiría esta comunidad de colaboración. Sus compañeras hacen lo propio con cada uno de sus equipos ya que este vivero de emprendimiento tampoco se entendería sin modelo de negocio o sin formación. Dadas por finalizadas las Coasesorías, el área de participación se ha puesto en marcha para recabar el máximo posible de adeptos y definir con cuantos miembros cuenta su equipo.
Por su parte, el equipo de modelo de negocio, con María a la cabeza, tiene como objetivo nutrir tanto el Comaster como el Codiseño, que hasta ahora habían sido impartidos por profesionales externos, con miembros de la Colaboradora expertos en estos mismos campos. De esta forma se produciría una sinergia entre el área de formación y el de modelo de negocio, dando la oportunidad de pasar al equipo de formadores a miembros de esta comunidad que tienen proyectos muy interesantes y amplios conocimientos.
Sin embargo, a pesar de sus objetivos marcados, ninguna de ellas deja claro cuál va a ser el futuro de la Colaboradora porque, como dice Marian, “la Colaboradora la construimos entre todos los que estamos aquí” y a su dinámica de trabajo se han ido añadiendo y se añadirán nuevas soluciones que resuelvan las necesidades de quienes la integran. Este ideal es reforzado por las tres conectoras, pero Selene también hace hincapié en la intención de que aquellos miembros cuyos proyectos ya estén establecidos puedan seguir siendo parte activa de la Colaboradora, fortaleciendo así la red de personas que hoy en día somos.
Y, para finalizar, nos quedaremos con una frase de María que resume a la perfección la esencia de la Colaboradora: “Juntos se llega mucho más lejos que por separado“.