En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, el próximo 26 de marzo hablaremos de emprendimiento migrante. Ese día, en Zaragoza Activa, conoceremos los testimonios de varias personas que eligieron la capital aragonesa para desarrollarse personal y profesionalmente.
Cada vez son más las personas emprendedoras de origen extranjero que eligen nuestra ciudad para establecerse, desarrollarse y crecer propiciando así la generación de empleo, la internacionalización y la diversificación de la economía de nuestra ciudad. Una realidad que constata que Zaragoza apuesta por la diversidad y la economía local y que defiende que juntos somos mucho más. Más creativos, más competitivos, más originales. En definitiva, más fuertes.
Este año, en el marco de la celebración del Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial que tiene lugar el 21 de marzo, Zaragoza Activa organiza su primer Foro abierto de emprendimiento migrante con el objetivo de dar a conocer algunos de estos testimonios. Y es que, cada año, son muchas las personas de origen extranjero las que llegan hasta aquí con el objetivo de participar en alguno de los programas de emprendimiento de ZAC. Personas que eligieron Zaragoza no solo como su hogar, si no como el lugar en el que desarrollarse profesionalmente y en el que volcar su creatividad.
Emprendimiento migrante, con nombres y apellidos
Ejemplo de ello son Pablo de Vicenzo, de Fuego y Alquimia; July Urrutia, con su consultoría de Bienestar Organizacional, Rita Balzi, de Balziconzeta; Ximena García Cartagena y su proyecto Conecta2; los chicos de Collabo, Max Ondó, José Ela y Simon Endaman; Ángel Briceño y su proyecto Visita Zaragoza; Hossana Guedez con Ideas Crafat y Diego Gaudini, con su proyecto The Cucumbers Música.
Continuamos nuestro paseo por el tejido del emprendimiento migrante de la ciudad de Zaragoza con otro proyecto con alma y sobre todo con muchas ganas, las de nuestros protagonistas. Se trata de Collabo, una plataforma colaborativa que busca conectar a personas que van a realizar un viaje con aquellos que quieren enviar paquetería a aquellos mismos destinos. Una manera sostenible de ofrecer variedad de opciones y una rapidez en la entrega pocas veces vista. Interesante, ¿verdad?
Un acto de valentía
Pues tras esta idea de negocio se encuentran tres jóvenes de Guinea Ecuatorial, Max Ondó (24), José Ela (25) y Simon Endaman (26), que hace mucho, mucho tiempo, decidieron que Zaragoza era el lugar indicado. “Llegué aquí tras terminar el instituto en mi país con el objetivo de continuar con mis estudios de grado en la Universidad de Zaragoza, en concreto en La Almunia”, explica Ondó, arquitecto técnico. Actualmente todos ellos tienen Collabo como una actividad extra pues José lo compatibiliza con sus estudios en Digitalización mientras que Simón trabaja como higienista dental.
Pero, ¿cuál es el factor diferencial de Collabo? “Sobre todo tratamos de mejorar la experiencia del usuario y que pueda ver en tiempo real cómo se desplaza su paquete de un destino a otro aumentando la seguridad. Además hemos implementado avisos por cercanía para reducir los retrasos en la entrega y que de esa forma podamos estar pendientes del paquete en todo momento”, afirma Ondó.
Y es que, si hablamos de aquello que hace distinto a este proyecto respecto a otros, Ela lo tiene claro: “sin duda el aspecto digital, el económico y el medioambiental. Collabo nace para mejorar el aprovechamiento de los espacios en los vehículos y la capacidad de transporte de las personas en sus viajes, para permitir envíos exprés más económicos y sostenibles”, asevera.
“He crecido aquí. Vivo, estudio y trabajo aquí y me siento de aquí”
En su caso, llegaron a Zaragoza Activa a través de ‘Convierte tu idea en Negocio’. “Necesitábamos un empujón para seguir desarrollando nuestra idea, algo que nos ayudó bastante a impulsarnos y dar los primeros pasos”, añade Tadeo. Un proceso de aprendizaje que les sirvió para sentar las bases de Collabo. Pues lo que tenían claro estos tres jóvenes es que Zaragoza era el lugar. “He crecido aquí. Vivo, estudio y trabajo aquí y me siento de aquí”, asegura Ela.
Y es que para ellos el del emprendimiento es un acto de valentía. “Personalmente animo a tomar acción sobre la voz ignorada. Esa que tenemos dentro y que a menudo acabamos callando. Esa es la que conoce bien nuestros sueños y proyectos, y es clave para alcanzarlos”, añade el joven, al que sigue, enseguida, su compañero. “Solo aquellas personas que están dispuestas a cambiar el mundo lo consiguen y la constancia es clave para poder hacer cualquier cosa. Hay que tener claros los objetivos e ir a por ellos. Y, sobre todo, recordar que las personas son siempre lo más importante”, concluye Ondó.
Zaragoza, una ciudad con potencial para el emprendimiento
Llegado desde Caracas, Venezuela, nos topamos con el testimonio del comunicador audiovisual y periodista Ángel Briceño (31) el cual llegó a Zaragoza en febrero de 2020, justo un mes antes de que se declarase el Estado de Alarma. “Fue a raíz del confinamiento cuando me replanteé un poco todo y una amiga me habló de la ciudad en la que vivía”, rememora. Así, en abril de 2020 llegó para quedarse.
“Zaragoza es una ciudad que tiene potencial a muchos niveles y vi la oportunidad de seguir desarrollando mi carrera de este lado. Sentí que podría abrirme camino al no estar saturada como las grandes ciudades de Europa o España donde la competencia evidentemente es más alta y las plazas u oportunidades son limitadas sobre todo llegando a un nuevo país”, asegura.
En su caso, decidió establecerse como fotógrafo al tiempo que creó la marca @ZaragozaExplorer. Una suerte de ventana a la que poder asomarse para conocer esta ciudad a través de sus ojos. En cuanto a su llegada a Zaragoza Activa, en su caso fue a través de ‘Convierte tu idea en negocio’. “Allí adquirí conocimientos sobre la gestión de una idea desde su concepción hasta su materialización. Además, obtuve información detallada sobre aspectos fiscales y tributarios relevantes para el desarrollo empresarial que pocas veces se conocen”, destaca.
Entre oportunidades y desafíos
“Los desafíos que enfrentamos en el camino hacia el éxito pueden ser enormes, pero también lo son las oportunidades que se presentan ante nosotros. Cada obstáculo es una oportunidad de crecimiento y aprendizaje, pero hay que mantener viva la pasión, perseverar y buscar constantemente formas de innovar y mejorar”, admite el joven. Además, asegura que para ello la comunidad emprendedora es una red de apoyo invaluable: “Es fundamental buscar orientación y colaboración entre los pares. Con determinación, creatividad y trabajo arduo, podemos convertir nuestras ideas en realidades que transformen nuestra ciudad y el mundo”.
Toca el momento de conocer la historia de Hossana Guedez Ávila (46), abogada de formación y creadora de IdeasCraft nacida en Venezuela y afincada en Zaragoza desde el año 2020, también en el marco de la pandemia. “Llegamos justo dos semanas antes del confinamiento por lo que todo se complicó mucho”, reconoce.
Sin embargo, eso no pudo con sus ganas de emprender y de convertir en realidad IdeasCraft, un sello de papelería creativa centrado en el diseño y la creación de piezas de papelería únicos y atractivos para decoraciones temática de eventos. Y es que, en sus palabras, aporta variedad y originalidad y mejora la estética de cualquier espacio. “Este tipo de decoraciones se utilizan comúnmente en fiestas, celebraciones y eventos especiales”, explica.
Emprendimiento, ¿quién dijo miedo?
“El espíritu de una marca o un artista puede reflejarse de varias formas. La papelería es, sin duda, una de las ramas más interesantes donde podemos verlo, tanto de manera visual como táctil, generando una experiencia satisfactoria a través de los sentidos”, explica. Y es que existen dos tipos de papelería, la corporativa y la enfocada al retail, además de un abanico de tipos de impresión y acabados disponibles, que puedes tener en cuenta al momento de diseñar y trasladar tus creaciones al papel.
En su caso, también aterrizó en Zaragoza Activa a través de ‘Convierte tu idea en un negocio’ donde le ayudaron, rememora, a materializar el proyecto “aportándome todos los conocimientos necesarios para ejecutarlo, tanto en temas financieros, jurídicos o de marketing. Fue un proceso es un proceso emocionante y desafiante que va más allá de la mera creatividad”. Y es que si hay algo que tiene claro Guedez y que ha aprendido en esta vida es que “cuando metes toda tu vida en una maleta para empezar de cero pierdes todos tus miedos”.
“Creo que el miedo al fracaso es la verdadera razón que frena a los emprendedores a la hora de poner en marcha su propio negocio, pero al mismo tiempo es una de las principales fuentes de aprendizajes tanto en lo profesional como el personal”, concluye.
Música, maestro
Y ¿Qué mejor forma de terminar el recorrido por estos testimonios de emprendimiento migrante que hacerlo con música? O, mejor dicho, de la mano de Diego Gaudini (49) y su proyecto The Cucumbers, Música en directo a la carta.
Natural de Resistencia, ciudad ubicada en la provincia del Chaco, en el nordeste argentino, se trata de un baterista y cantante con alma emprendedora que llegó a España, en concreto a Barcelona, en el año 2002, donde estuvo una temporada tocando por sus calles. “Así fue hasta que un amigo me llamó para decirme que en la orquesta en la que trabajaba necesitaban un “pipa”. Puse dirección a Zaragoza donde encontré un grupo de gente que en última instancia fue el motivo de que decidiera quedarme en tierras mañas”, admite.
Así, aunque todavía sin saberlo, hace 15 años se sentarían las bases de The Cucumbers, un proyecto musical que surgió pensando en todo tipo de eventos sociales y que con el tiempo comenzó a dar el salto a eventos corporativos en todo el país especializándose en ‘Team building’. “Hace un par de años ampliamos el servicio con ejercicios de creación de equipos para empresas y ahora estamos en una transformación mayor llevando adelante la idea de la organización total del evento”, afirma.
De hecho, con motivo de su aniversario, el objetivo es dar un paso más allá: “Desde el principio nuestra idea fue ofrecer al cliente una experiencia musical cercana y profunda, a la vez que un servicio personalizado donde pudiese sentirse naturalmente a gusto. Estamos dedicados a ello en cuerpo y alma y creemos que ofrecemos una propuesta diferente”.
Un mundo por descubrir
En su caso, llegaron a ZAC un poco por casualidad en busca de asesoría para convertir esta idea de negocio en realidad. Y vaya si lo hicieron: “Por aquel entonces esto del ‘team building’ estaban todavía en pañales. Allí comenzó un nuevo camino pues tuve que enfrentarme a una realidad que para mí era desconocida. Fue maravilloso coincidir con personas que de otra manera hubiera sido muy difícil conocer”.
Y no solo eso, sino que, en su opinión, uno de los aspectos más trascendentes de su paso por Zaragoza Activa fue el hecho de ratificar algunas ideas y prácticas que jamás hubiera imaginado. “Este ejercicio me llenó de confianza y sentí que mucho de mi esfuerzo no había caído en saco roto y que en la mayoría de las cuestiones de máxima importancia no había estado desentonado… Tal vez la confianza haya sido el mayor aporte recibido”, reivindica.
Parafraseando a Frank Herbert, autor de Dune, concluye: “No debo tener miedo. El miedo mata la mente. El miedo es la pequeña muerte que conduce a la destrucción total. Afrontaré mi miedo. Permitiré que pase sobre mí y a través de mí. Y cuando haya pasado, giraré mi ojo interior para escrutar su camino. Allá donde haya pasado el miedo ya no habrá nada. Sólo estaré yo”.
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