Carla Davidson es miembro de La Colaboradora en la modalidad de ‘coworking’, es decir, ocupa uno de los 25 puestos de trabajo fijos que ofrece esta comunidad de emprendedores en La Azucarera, sede de Zaragoza Activa. Formar parte de este particular espacio, que incorpora en su modelo de gestión un banco del tiempo, conlleva el pago de 4 horas al mes de colaboración. Una experiencia que, como nos cuenta Carla en esta entrevista, está teniendo consecuencias muy positivas para su proyecto de traducción e interpretación.

¿Quién es Carla Davidson?

Soy traductora e intérprete, mitad escocesa y mitad española. Mi padre es escocés y mi madre, española. Me crié en Edimburgo pero pasábamos cada verano en España. Estar rodeada del inglés y el español desde muy pequeña despertó en mí el interés por los idiomas en general y creo que en gran parte ha sido la razón por la que ahora soy traductora e intérprete.

¿Qué te trajo a Zaragoza?

Vine a Zaragoza en septiembre del año pasado por unas prácticas de interpretación en el Instituto Agronómico Mediterráneo de Zaragoza. Pensé que me volvería a Edimburgo después, pero ¡aquí sigo más de un año después!

¿Por qué decidiste unirte a La Colaboradora?

Me uní a La Colaboradora en mayo de este año. Llevaba 6 años trabajando en casa y tenía ganas de trabajar en un espacio de ‘coworking’. Tener el despacho en casa tiene sus ventajas pero es muy solitario y aburrido trabajar sola. Además, resulta difícil separar el trabajo de la vida diaria. Por otro lado, antes vivía en Londres y en Edimburgo y no podía permitirme el gasto extra que supone un ‘coworking’ en estas ciudades. Aquí es más asequible y la idea del banco de tiempo me gusta mucho.

Foto: Álvaro Sierra.
Carla ocupa uno de los 25 puestos fijos del coworking de La Colaboradora. ©Álvaro Sierra.

Entraste en este espacio de ‘coworking’ con un proyecto de traducción e interpretación.

Sí, traduzco del español, portugués y alemán al inglés e interpreto del español al inglés y del inglés al español. Documentos escritos (páginas web, contratos, certificados) en el caso de la traducción; comunicación oral (reuniones, conversaciones telefónicas, congresos) en el caso de la interpretación.

¿De algún sector en particular?

Estoy especializada en la traducción jurídica, comercial, en textos de marketing, moda y gastronomía y algo de agricultura a partir de mi experiencia en el Instituto Agronómico Mediterráneo de Zaragoza. Trabajo para varios tipos de clientes: particulares, PYMES, agencias de traducción, agencias audiovisuales u organizaciones internacionales como la ONU y la UE. En cuanto a la interpretación, hasta la fecha he hecho de intérprete, por ejemplo, para Marta Gastón, Consejera de Economía, Industria y Empleo del Gobierno de Aragón; Zarza Estudio, compañera de gran talento de La Colaboradora; y hace poco, para varios actores y directores en el festival de cine español en Edimburgo.

Háblanos un poco más de esta última experiencia. ¿En qué consistió exactamente tu trabajo en el festival?

Fue una experiencia muy buena para mí. Incluso llegué a conocer a Paula Ortiz, que viajó a Edimburgo para abrir el festival con su película La Novia. Mi trabajo consistió en hacer de intérprete durante las sesiones de preguntas y respuestas para algunos de los directores y actores, además de un chef que cuenta con una estrella Michelin. Interpreté del español al inglés durante tres días: en el primero se proyectaron 9 cortometrajes; en el segundo, el documental Club de Reyes; y en el tercero, tres documentales cortos: Sollo, Eres lo que Comes y The Perfect Protein, seguido por un evento gastronómico.

Carla Davidson
Carla trabajó como intérprete en el festival de cine español de Edimburgo. ©Edinburgh Spanish Film Festival.

Tiene que ser complicado anticipar las preguntas del público en un evento así. ¿Cómo te preparaste?

Una de las partes más importantes del trabajo de un intérprete es investigar bien los temas que van a surgir para poder elaborar glosarios y estar preparado porque nunca se sabe de qué se va a hablar exactamente y menos aún cuando hay participación del público. En este caso, me preparé para el trabajo durante varios días viendo las películas que estaban disponibles una y otra vez, buscando toda la información que podía sobre los filmes, los premios que habían recibido, otros festivales en los que se proyectaron, las películas anteriores de los directores y actores… Todo sirve para estar mejor preparada y así poder transmitir bien el mensaje, además de sentirse menos nerviosa el día de la interpretación.

Llegado ese día, ¿qué aspectos conviene tener en cuenta para transmitir bien el mensaje?

Hay que saber cómo reflejar bien la personalidad de cada uno. En el festival, algunos hablaban más rápido, otros más despacio, otros contaban chistes y había que transmitir todo esto en cada momento. Siempre pienso que ser intérprete de lenguas tiene que ser parecido a ser actor porque hay que actuar como la persona a la que estás interpretando pero, aun así, ser un poco ‘invisible’ porque eres simplemente la persona que transmite el mensaje. Hay que buscar ese equilibrio.

¿Dónde ves tu proyecto en el futuro?

Me gustaría poder trabajar cada vez más como intérprete con la oportunidad de viajar a distintos lugares y aprender sobre una variedad de temas. El aprendizaje continuo es una de las cosas que más me gustan de este trabajo. Además, estoy interesada en encontrar más clientes locales en Zaragoza y poder traducir varios tipos de documentos. En particular, me interesa la traducción de páginas web, blogs y cuentas en las redes sociales.

¿De qué forma contribuye La Colaboradora al desarrollo de tu proyecto?

La Colaboradora me ha ayudado de varias formas. Ha contribuido a desarrollar mi proyecto a la hora de conocer a nuevos clientes y aprender sobre el marketing o temas financieros en los talleres de coformación, por ejemplo. Me dio la oportunidad de conocer a Rebeca, de Zarza Estudio, y poder viajar a París con ella como su intérprete durante una feria de moda. He podido, además, conocer a muchas otras personas simpáticas que me han ayudado con fotos de perfil (¡gracias, Almudena!) o que me van a ayudar con el diseño de mi página web (¡gracias, Kevin!).

Carla Davidson
Fiesta de bienvenida en La Colaboradora, mayo 2016. ©Nacho Bueno.

 

*Foto en blanco y negro: ©Almudena Caso.

Comunicación La Colaboradora

La Colaboradora es un espacio físico de Inteligencia Colectiva donde una comunidad colaborativa trabaja en sus proyectos empresariales, sociales o creativos con el único requisito de pago de intercambiar ideas, servicios y conocimiento a través de un banco del tiempo para fortalecer la economía colaborativa de sus miembros y su entorno.

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