Dentro del proyecto MADE IN ZARAGOZA de impulso creativo en la ciudad de Zaragoza, TRANS SOCIAL EXPRESS es un espacio artístico que pone en valor el arte independiente, que busca evidenciar el cambio en los paradigmas de producción artística surgidos de los profundos cambios sociales a raíz de la crisis económica de 2008.
Junto a la propia intervención artística del autor invitado, “Diálogos Trans Social Express” es un encuentro cara a cara con el artista a modo de charla con el comisario del proyecto, Sergio Sevilla, en el que se ofrecen pautas para una aproximación a la obra y una lectura de ésta en el contexto conceptual del proyecto.
TRANS SOCIAL EXPRESS CON GEMA RUPÉREZ
Introducción: sobre el autor
En la tercera edición de #CórnerMiZ nos acompaña la obra de Gema Rupérez, artista zaragozana caracterizada por evidenciar las contradicciones humanas a través de obras caracterizadas por un sutil pero marcado mensaje oculto y que superan las dos dimensiones para implicar el espectador en la construcción de la obra.
Jugando con los conceptos y con un marcado carácter social y psicológico, su obra representa el dolor en las relaciones introspectivas de la persona como de sus relaciones con el entorno, metáforas visuales que nos hacen reflexionar de nuestro papel como sujetos en Sociedad.
Aquí os dejamos un fragmento del diálogo entre Sergio y Gema.
El diálogo
Pregunta Sergio Sevilla (SS): ¿Cómo ves los cambios en las formas de producir arte en Zaragoza desde tu vuelta a Zaragoza y que diferencias puedes observar con respecto a Valencia?
Responde Gema Rupérez (GR): Me fui a los 18 años de Zaragoza y, la verdad, todavía no estaba introducida en el mundo del arte como tal… No tenía experiencia. Conforme pasa el tiempo, sí te vas implicando más en la ciudad… pero la verdad es que acabo de retornar a Zaragoza, y ahora estoy ubicándome…
El IVAM si era un punto de fuga muy interesante en lo que ofrecía. Yo creo que era muy importante y motivador para la gente que vive el arte en Valencia… y en mi caso particular fue fundamental en mi formación la Biblioteca… Era un punto para ir todos los días. Por otro lado, ahora sí que me doy cuenta que Zaragoza permite moverse bastante en cuanto a arte independiente.
SS: A la hora de la inspiración, ¿qué te motiva?
GR: El otro día leí algo sobre Carlos Cruz-Diez, que dice que “él no se inspira, sino que reflexiona”. Yo siento que me acerco a esta postura, cada vez siento más “que reflexiono” que “que me inspiro”.
La motivación de mis obras depende un poco del momento en que genero la obra, y si es cierto que en algunas obras estoy muy influida por las contradicciones que estaba viviendo en cada momento.
SS: ¿Por qué no representas rostros? ¿Por qué tan pocos elementos en tus obras?
GR: No me interesa la persona en concreto, sino el individuo en general. Me gusta hablar del uno como todos. Mis obras dependen de lo que quiero contar y de los espacios donde suceden, no del sujeto en sí.
Considero que reducir elementos es interesante, porque los que incluyo ya por si tienen suficiente fuerza, contradiciendo al propio objeto y dirigiendo al concepto. Encontrarme frente a estos objetos y sus límites, me ofrecen oportunidades.
Las obras tiene su propia vida, y cada vez me preocupa menos que sea efímera. Tiene un nacimiento, la relación con el espectador y su desaparición.
SS: ¿Por qué introducir la comida y como se llega a esta síntesis en “Lens Culinaris”?
GR: 300 kilos de lentejas equivalen a los 6 millones de granos de lentejas, que es el número de parados que hay en España. En un principio esta obra iba a ser expuesta en un monasterio, en el refectorio, y me parecía interesante jugar con el significado de las lentejas en ese enclave.
SS: Aquí, en Córner MiZ, has presentado tu obra exterior reproducida. ¿En que consiste “Pan para hoy” y por qué un espacio exterior?
GR: La idea nace durante la creación de otra pieza para otra exposición. Se llama “Pan para hoy” porque todo el mundo sabe cómo continua el refrán… Me parece representativo de todo lo que está pasando ahora.
Intervenciones en espacio exterior tengo muy pocas. Me resulta muy atractivo este trabajo porque me gusta ver que es lo que pasa en las cosas cuando están fuera, a la intemperie y al tiempo, y trasladarlo al interior a través del reportaje fotográfico de Beatriz Orduña.
En esta obra utilizo las cortezas del pan (que me sobran del proceso creativo de la otra obra que he comentado) para escribir el título en el exterior. La duración de esta obra es muy corta, sólo un día… La intemperie la acabo descomponiendo.
La intervención
Zaragoza Activa
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