Una de las cualidades que me sorprenden gratamente de los miembros emprendedores de La Colaboradora es la capacidad de utilizar la asertividad a la hora de relacionarse y dar su opinión en las formaciones, reuniones, desayunos y eventos en general dentro de Zaragoza Activa.
Os preguntaréis, y ¿por qué te sorprende tanto Carol?. El motivo es porque es una habilidad blanda o ‘soft skill’ que no todos y todas traemos de serie… sino que se aprende y se ejercita en el día a día. Es una de las habilidades blandas mejor valoradas hoy en día profesionalmente.
En ámbitos laborales es muy fácil encontrar personas que se expresan, piden, dan y opinan de una manera “poco asertiva”, dañando e incomodando a otros compañeros/as en el puesto de trabajo. Me gustaría hablar un poquito más sobre ello y comenzar explicando lo qué es.
¿Qué es la asertividad?
Sencillamente, se trata de una forma de relacionarnos que implica respetar los limites de los demás y los propios. Incluye un gran conjunto de conductas interpersonales que permiten a la persona expresar adecuadamente sus opiniones, necesidades, sentimientos y emociones con sinceridad y claridad, respetando tanto a los demás como a sí misma.
¿Cómo te expresas con los demás?
Os añadiré algunas de las características de los estilos que puede adquirir una persona según su forma de comportarse o pensar (a ver en cuál os identificáis):
Estilo pasivo
Forma de comportarse:
. Volumen de voz bajo, habla temblorosa, tartamudeos y bloqueos.
. Huida del contacto ocular, mirada baja, postura tensa….
. Inseguridad en actos.
. Frecuentes quejas a terceros.
. Verbalizaciones típicas: “ quizás”, “supongo”, “eh”, “bueno”,” ¿te importaría mucho si…?
Forma de pensar:
. No dan importancia a lo que ellos piensen o sientan, pero sí a lo que piensen o sientan los demás.
. No respetan sus propios limites y derechos.
. Piensan que es necesario ser querido y apreciado por todo el mundo.
. Tienen una sensación constante de incomprensión.
. Consideran que así evitan molestar u ofender.
Los sentimientos que muestran las personas con este estilo son:
. Impotentes y frustrados por no poder conseguir lo que quieren y ceder siempre.
. Culpables.
. Ansiosos por la falta de control sobre lo que sucede.
Las consecuencias de adoptar este estilo son:
. Pérdida de valor de nosotros mismos, baja autoestima.
. Hace sentir a los demás culpables o superiores. Puede que la otra persona tenga una sensación de deuda con la persona inhibida o que se sienta superior y se aproveche de ella.
. Normalmente, tienen estallidos de agresividad, por estar continuamente reprimiendo sus propios deseos.
Estilo agresivo
Forma de comportarse:
. Volumen de voz elevado, habla precipitada y estilo tajante, continuas interrupciones y empleo de insultos y amenazas.
. Contacto ocular retador, cara y manos tensas, postura intimidante.
. Tendencia al contraataque.
. Verbalizaciones típicas: “ haz”, “ten cuidado”, “si no lo haces…”, “deberías…”, “no sabes”.
Forma de pensar:
. Piensan que sólo ellos importan y no tienen en cuenta lo que piensen o sientan los demás. No respetan los límites y derechos ajenos.
. Creen que si no se comportan de ese modo se van a sentir desprotegidos.
. Todo lo sitúan en términos absolutos, de ganar o perder.
. Pueden tener creencias del tipo “ hay gente mala que merece ser castigada”
¿Cómo se sienten los que adoptan este estilo?
. Ansiedad creciente
. Soledad, culpa y frustración.
. Sensación de falta de control.
. Enfado constante.
Las consecuencias de adoptar este estilo son:
. Generalmente rechazo o huida por parte de los demás.
. Conducta de “circulo vicioso” por forzar a los demás a ser cada vez más hostiles y aumentar así más su agresividad.
Estilo asertivo
Forma de comportarse:
. Habla fluida y segura, sin bloqueos ni muletillas.
. Contacto ocular directo pero no desafiante, postura relajada.
. Expresan sentimientos tanto positivos como negativos.
. Muestran capacidad para hablar de gustos e intereses.
. Se saben defender sin agresividad.
. Son capaces de discrepar sin entrar en discusiones.
. Saben aceptar errores y pedir aclaraciones.
. Saben decir “no”.
Forma de pensar:
. Conocen y respetan los derechos propios y ajenos.
Las personas que adoptan este estilo muestran los siguientes sentimientos:
. Buena autoestima
. Satisfechos con sus relaciones.
. Respetuosos consigo mismos.
. Sensación de control emocional.
Las consecuencias de adoptar este estilo son:
. Frenan o desarman a la persona que los ataque.
. Pueden aclarar los equívocos.
. Los demás se sienten respetados.
. La persona asertiva suele ser considerada “buena”, no “tonta”.
Y tú, ¿Cómo te expresas con los demás? ¿te has sentido identificado?
Os puedo decir que nadie es totalmente agresivo, pasivo o asertivo. Cada uno tenemos una tendencia más o menos acentuada hacia uno u otro estilo, pero no existen “estilos puros”.
El objetivo no es ser perfectamente asertivo en todo momento, sino ir acercándonos poco a poco y mediante las técnicas adecuadas a este modelo.
Recordad que adoptar un estilo asertivo no garantiza que los demás nos respondan del mismo modo. Sin embargo, usar las estrategias asertivas te permiten negociar y sentirte más a gusto contigo mismo/a.
Y tú ¿Cómo te expresas con los demás?

Cómo entrenar la asertividad en seis pasos
El entrenamiento en asertividad incluye numerosas técnicas básicas para hacer respetar nuestros derechos asertivos fundamentales, ayudarnos a expresar adecuadamente nuestros pensamientos y sentimientos y hacer frente a las manipulaciones de los demás.
Además, me gustaría concluir dejando 6 etapas para que podáis entrenar y/o mejorar vuestra asertividad de una forma consciente.
¿Cómo te expresas con los demás? Estos 6 puntos te van a ayudar.
1- Identifica tu estilo predominante (pasivo, agresivo o asertivo): se trata de distinguir el estilo que más usamos al relacionarnos con los demás. Esto sirve para reconocer nuestros errores y poder corregirlos.
2- Identificar las situaciones más problemáticas para nosotros y la forma en que nos gustaría abordarlas en el futuro.
3- Describir las situaciones problemáticas, se trata de analizar todos los aspectos de las situaciones: quién, cuándo, qué y cómo. Esto nos sirve para detectar los pensamientos negativos y delimitar el objetivo que nos gustaría conseguir.
4- Escribir un guion para el cambio de nuestra conducta: es un plan escrito en el que detallemos cómo vamos a afrontar las situaciones de manera asertiva, es decir cómo va a ser nuestra conducta en esa situación en el futuro.
5- Desarrollar un lenguaje corporal adecuado: no solo las palabras tienen significado, sino que también la postura que se adopte, la mirada y el tono de voz influyen.
6- Identificar y evitar las manipulaciones de los demás significa que con todo lo aprendido lo pongas en práctica cuando veas una manipulación que atente contra nuestros derechos básicos.
Carol Artero (Socia-fundadora de Descúbrete Zaragoza)